LA RESPONSABILIDAD DE LOS DT

Jugadas diez fechas del Torneo Apertura, ya cinco técnicos han dejado sus equipos, a razón de uno cada dos fechas y eso marca claramente el acortamiento de los tiempos que rigen para las escuadras de fútbol de nuestro país hoy en día, pero también denotan un poco de irresponsabilidad por parte de los profesionales que sin ser despedidos, deciden de un día para el otro poner fin a su trabajo “renunciando” a su compromiso laboral.

Ustedes pueden decirme: ¡Y que querés que hagan si no sacan resultados! Y tienen razón cuando es así, pero ahora nos estamos encontrando con casos realmente llamativos como el de Mohamed en Huracán que se fue cuando a su equipo le iba mas o menos bien aduciendo malas condiciones de trabajo y tres días después asumía Osvaldo Ardiles ¿A Ossie no le importa trabajar sin pelotas y ducharse con agua fría? No creo que sea así. Otro caso llamativo es el de Gustavo Costas en Racing, que la semana pasada protagonizó un culebrón digno de la TV venezolana, amagando a renunciar tras un supuesto sondeo de los dirigentes con otro técnico y el caso más llamativo es la renuncia de Ricardo Lombardi en Argentinos Juniors aduciendo problemas de salud y quince días más tarde asumiendo en Newell´s lozano y rozagante ¿habrá sido un milagro de la medicina?

Ser Director Técnico es un trabajo y como tal los “Obreros” tienen derechos y obligaciones. Siempre escuchamos ó leemos de que viven en la cuerda floja, que casi nunca los dirigentes respetan lo firmado y varios etc. más y nos enojamos cuando nos enteramos de que algo así ocurre. Pero hay veces que los propios DT son los que no cumplen con sus obligaciones ¿ó nunca escucharon de técnicos que son poco adeptos al trabajo, ó de aquellos que llevan a sus equipos jugadores amigos, familiares ó representados por el mismo agente que ellos, sea cual fuere la jerarquía del player? Eso, algunas otras situaciones que ustedes seguramente recordarán, más el hecho de renunciar cómodamente tras los primeros cinco partidos de un torneo y dejar en banda al plantel que ellos conformaron y a los dirigentes que confiaron en su trabajo al momento de contratarlo, son verdaderos actos de irresponsabilidad que perjudican directamente al club para el que trabajaba.

Permanentemente escuchamos a los profesionales del fútbol quejarse y exigir condiciones de trabajo dignas, tratos justos y demás exigencias que son totalmente merecidas pero pocas veces oímos a estos mismos señores hacer un “mea culpa” en forma pública y reconocer que no actuaron bien en muchas situaciones. Y si de algo estoy seguro es que de las actuaciones de los técnicos de hoy, dependerá el trato que tengan en el futuro.