LA MARICONIZACIÓN DEL FÚTBOL

El fútbol, como todas las cosas de la vida, siempre está en proceso de cambio, ya sea con avances ó retrocesos. Alguna vez escuché el término de que el fútbol argentino iba a vivir un proceso de “uruguayización”, refiriéndose a que iban a salir campeones siempre dos ó tres equipos, cosa que no se cumplió. Y en estos últimos tiempos de vacas cada vez más flacas, escuché por ahí que en el fútbol argentino vivía un proceso de “nacionalbetización”, haciendo mención a la pobreza de los planteles.

Siendo ciertas ó no estas afirmaciones, a mi me causa gracia el nombre con el que se “bautizó” a estas etapas y hoy mientras leía este post del reeditado blog “Fútbol y algo más”, cuyo link encontrará a la derecha de la pantalla señora, me cayó la ficha de que nuestro fútbol y creo que a nivel mundial también, se está mariconizando.

Hoy es común escuchar dolidas declaraciones de jugadores, no encontrando explicaciones a la pregunta de “¿por qué soy suplente?” tirándole todo el fardo al DT de turno, exponiéndolo ante los hinchas y la consideración general. También en el juego mismo, vemos a jugadores por demás de coquetos produciéndose como para una fiesta cuando en realidad van a jugar un partido de fútbol, con vinchas de dudoso gusto, gel, botines de colores y demás accesorios. Otro caso, son las enormes demoras que se suceden al momento de un foul, los players se quedan varios minutos tirados en el piso, retorciéndose de dolor, y cuando llega la asistencia salen caminando como si nada y también tenemos el caso extremo de los jugadores que hacen una denuncia judicial porque durante el partido le dijeron “negro de mierda”.

Yo soy medio chapado a la antigua y estas actitudes un poco “mariconas” me están cansando. Para mí un jugador solo debe hablar dentro de la cancha para arengar a sus compañeros, debe usar botines negros lustrados con grasa y las medias altas, la camiseta holgada y a lo sumo una gorrita para el arquero. Hoy dejo la objetividad de lado y les escribo como hombre que le gusta el fútbol, como hincha que concurre a un estadio ó que se sienta a ver un partido por TV, y les digo a esos jugadores: ¡¡Callate la boca y jugá!! Si sos suplente, no preguntes y rompete el culo para jugar de titular el domingo que viene. Sacate esos accesorios que te hacen parecer una corista de cabaret más que un jugador y sos la vergüenza de los hinchas de tu equipo. Si te caes por un foul, levantate enseguida y la próxima jugada ponete más fuerte para que no te tumben. Y si te dicen algo, reíte, tirale un caño, y contestale con fútbol”

Contaba alguna vez Diego Maradona que la primer vez que jugó contra River Plate, al minuto de juego tiró una pelota larga y salió Roberto Perfumo al cruce, metiéndole una hermosa plancha en el pecho. El diez cayó y se armó un racimo de jugadores, junto al árbitro. Perfumo se acercó a Diego todavía en el piso, delante del mismísimo referee, lo tomó de los pelos y le dijo: ¿No es cierto que no te hice nada nene? A lo que Maradona respondió: ¡¡Noo Roberto, todo bien!! Y el partido siguió como si nada. ¡¡Por favor, volvamos a las fuentes!! Dejen las lagrimeadas de lado y jueguen al fútbol que por eso, dicen, es un deporte para hombres.