LEYENDAS (URBANAS) DEL FUTBOL

Leyendas urbanas son historias populares que nadie sabe a ciencia cierta si son verídicas ó no.

El fútbol no está excenta de ellas, y me pareció una buena idea acercarles algunas para que ustedes conozcan y disfruten como si fuera en fogón campamentero y de paso terminar de redondear la idea del post anterior.

La bruja cervezera

Cuenta esta historia, que en el año 1989 Quilmes estaba muy bien posicionado en el campeonato del Nacional B y unos dirigentes no tuvieron la mejor idea que solicitar los servicios de una bruja para que realize unos trabajitos y así ayudar al equipo. La señora en cuestión, luego de acordar el monto a cobrar una vez logrado el objetivo del ascenso, no defraudó y los cervezeros salieron campeones.

Luego de los festejos, la hechicera comenzó a reclamar el pago por los servicios prestados pero los dirigentes eufóricos y resultadistas se negaron a abonar lo convenido, lo que causó la ira de la mujer que les hechó una maldición que incluía un rápido descenso de categoría y la imposibilidad de ascender durante trece años. Los dirigentes reían y brindaban.

La temporada 89-90 en la "A", Quilmes la pasó sin pena ni gloria y se fué dando lástima al Nacional B nuevamente, cosa que poco pareció importar ya que los dirigentes de la institución sabían que contaban con los medios económicos necesarios para armar un gran equipo para volver a jugar en primera división.

Y desde ese año comenzaría para el club uno de los periplos más oscuros de su historia ya que año tras año armaba equipos de gran categoría para la divisional que fracasaban siempre, recordando que llegó a perder tres finales para el ascenso durante tres años consecutivos.

Los jugadores, la hinchada, nadie podía creer lo que sucedía, ¡si parecía cosas de brujas! Entonces, aquellos dirigentes recordaron la maldición e intentaron remediar el asunto. Fueron nuevamente en búsqueda de aquella bruja para pagar lo adeudado pero al llegar a su casa se encontraron con que ella había fallecido un año antes. Y peor fué el remedio ya que le llevaron flores al cementerio pero equivocaron la tumba así que apesadumbrados se resignaron a su desgracia, y hasta dejaron de armar grandes equipos.

Jugaron esa temporada pero no veían grandes diferencias con las anteriores, y sólo lograron clasificar con lo justo al octogonal de repechaje para pelear por un ascenso. Pero de pronto, el equipo empezó a jugar como nunca, a ganar y....ganaron ese mini torneo y volvieron a la primera división donde hasta el día de hoy se mantienen. Era el año 2003, justo trece años después de aquella maldición.

TRABAJITO TATENGUE (Dedicado a Darío)

En el año 1989 jugaban la final del Nacional B Unión de Santa Fe frente a Colón de la misma ciudad.

Ambos equipos se habían reforzado muy bien para esa temporada y se merecían jugar en primera pero sólo había lugar para uno solo. La ciudad y la zona hervían por la definición ya que no sólo estaba en juego el ascenso, sino el orgullo, el honor y todo lo que se juega en un clásico.

Unión ganó ambos partidos y lo festeja hasta el día de hoy. Los de Colón, no podían con su alma y no le encontraban explicación futbolística al hecho por lo cual decidieron contratar una bruja para "exorcisar" el estadio.

Esta mujer entró a la cancha, se concentró, dijo unas palabras inentendibles, se dirijió atrás del arco donde habían recibido los goles y empezó a cavar con fuerza. Allí, debajo del verde césped, encontró enterradas unas tijeras con cintas rojinegras atadas; un claro signo de magia negra.

LA BIENVENIDA

En el Campeonato Mundial 1986 cuando Ricardo Bochini ingresa a jugar los últimos tres minutos del partido de semifinales frente a Bélgica (en lo que sería su única participación mundialista), Diego Maradona que lo idolatraba, se paró cerca de la línea de cal y le dijo: "Bienvenido maestro, lo estábamos esperando".

Dicen que Bochini sonrió, aunque él mismo diga que ni se acuerda del hecho.

EL PROFETA

Dicen que en el año 1500 más ó menos, Dios le dió poderes proféticos a una persona con la condición de que no lo divulgue. Pero éste hombre desobedeció y predijo cosas ante quien quiera escucharlo, se hizo llamar Nostradamus.

Para castigarlo, Dios lo hizo reencarnar en Argentina, le quitó sus dones pero le hizo creer

que todavía los conserva y se la pasa haciendo predicciones que nunca se cumplen. A esa persona hoy se la conoce como Guillermo Nimo.

Hay muchas leyendas urbanas del fútbol y espero que ustedes acerquen algunas. Pero las más cruel de todas es ésa que dice que Maxi López es buen jugador.