TARDE DE CANCHA: EL CLÁSICO RAFAELINO

Tarde pero seguro, llega un post perteneciente a la sección preferida de mi hermano Gogui y del protector Padrino. Es que el sábado pasado jugaron Ben Hur - Atlético y por supuesto que asistí al estadio para acercarles las incidencias del match.

Para quienes no son de Rafaela, les cuento que en la previa del partido siempre se discute si el encuentro puede denominarse Clásico ó no, ya que estos clubes aunque son originarios de la misma ciudad nunca fueron acérrimos rivales y la participación de la BH en la B Nacional es muy reciente. Yo alguna vez ya emití mi opinión (que pueden leer haciendo click acá), pero para los que todavía dudaban, a partir del sábado no tienen más argumentos: el partido se recibió de clásico.

Y me atrevo a afirmar esto porque el encuentro, además de jugarse a estadio completo y con dientes apretados, mostró ganador al que previamente venía de punto. Atlético trató de jugarlo con sus armas: pelota bien tratada y sumando varios jugadores en ataque mientras que Ben Hur, entendió el juego y supo esperarlo para a los 15 minutos del segundo tiempo concretar un contraataque fenomenal y así marcar el único tanto del partido, que a la postre fué festejado hasta altas horas de la noche, tal los bocinazos que escuchaba en las inmediaciones de mi hogar.

Así es que los rafaelinos tenemos ahora un nuevo clásico en la ciudad, tal como lo son las carreras de autos, las fábricas de autopartes, las industrias lácteas y los frigoríficos. Y hablando de eso, y a modo de apostilla, les dejo la imagen de la incidencia más destacada del cotejo. No, no es la del gol que pueden ver en cualquier publicación.

Es la del refrigerio que me comí en el entretiempo, provisto por la gente de prensa del club local y que constaba de galletitas de agua tipo Express, fiambre muy fresco (yo elegí bondiola) y todo acmpañado con gaseosa a buena temperatura.

Calificación del servicio: 4 pelotitas.

¡¡¡Jamón del medio!!!